Continuamos com a partilha das vivências missionárias, além fronteiras. Hoje vamos conhecer um pouco da vida das irmãs, que estão na Guatemala.
HERMANA GABRIELA LOURDES NOJ NIJ
Pies andantes, corazón abierto y sensible, mente disponible, acogiendo la savia de la vida, del pueblo, de los pobres, de mujeres, de migrantes, de la juventud, de la universidad, de las jóvenes postulantes, de las hermanas, compañeras de camino, palpitando por un mismo proyecto… es ahí donde la Palabra de cada día tiene sentido y se concretiza.
Acompañar a las jóvenes en su etapa de postulantado, en un tiempo de crisis humanitaria, ha sido un desafío grande. ¿Cómo hablar de misión, de ir a los pequeñitos que piden pan en un tiempo de “quédate en casa”?
La pandemia ha sido el caos que llegó para ordenar de nuevo las motivaciones de mi vocación. La Ruah me ha conducido por caminos insospechados, aprendiendo cada día, inclusive, a tener que priorizar misiones. Eso no ha sido fácil.
La vida comunitaria, como la misión en redes fue el camino para estar y compartir con los pequeñitos que tocaban la puerta, acompañar a las familias que vivieron la partida de sus seres queridos por el COVID, las comunidades que en medio de la crisis continuaron resistiendo en su lucha por la tierra y el agua. La Ruah se fue manifestando en una nueva realidad, imprecisa, clamando con intensidad, dolorosa… ahí llega la gracia y la esperanza, el fuego que habita en el corazón y que me permitió vibrar más en este proyecto de vida que he asumido con el corazón y todo mi ser como Hermana Catequista Franciscana.
HERMANA PERCILIANA DAS DORES SANTANA.
Desde pequeña decía a mi madre que un día iría atravesar el mar para ser misionera. Ahora estoy yo aquí en esta tierra querida de Guatemala. Confieso que cuando Hermana Lucia Gianesini manifestó que necesitaba alguien para venir a Guatemala no pensé dos veces y me ofrecí: “Voy”. Aquí estoy hace dos años. Trabajo con los “Misioneros de la Vida” en un proyecto de salud alternativa (bioenergética). Ha sido una oportunidad de crecimiento en todos los aspectos de mi vida. Lo que más me fascina es la cultura. ¡Qué bonito! En el proyecto trabajamos con más de 130 cualidades de plantas medicinales y cada día vamos conociendo otras más a través del grupo que, por ser la mayoría indígena tiene un rico conocimiento de las plantas.En este cambio de saberes vamos trabajando. Hay momentos orantes, recreativos, formación, convivencia.
Agradezco a la Congregación por esta oportunidad de estar en tierras guatemaltecas.Que la Virgen de Guadalupe me ayude a ser cada día más fiel en el seguimiento de Jesús a ejemplo de Francisco y Clara de Asís.
HERMANA ALZIRA MUNHOZ.
En estos cuatro años que estoy viviendo en Guatemala puedo decir que me siento muy bien en medio de este pueblo tan querido que me acoge con mucho cariño y apertura. Mi misión aquí está básicamente centrada en el campo de la formación. Doy clases de teología para estudiantes universitarios de varias congregaciones femeninas y masculinas y laicos. Colaboro semanalmente en la formación bíblica para la juventud de CONFREGUA (Conferencia de Religiosas y Religiosos de Guatemala), donde participan varias congregaciones. Otro campo de misión que me da mucha alegría es la formación bíblico-teológica para laicas y laicos en la Escuela de Teología “Monseñor Gerardi” y en una parroquia franciscana que acompaño hace cuatro años. Amo todo lo que realizo, pero el trabajo de formación junto a las mujeres ocupa un espacio privilegiado en mi vida-misión en varias dimensiones: actúo junto al “Núcleo Mujeres y Teología” colaborando en cursos, retiros y seminarios específicos de formación para mujeres de los sectores populares, también de la Vida Religiosa femenina. Varias congregaciones ya me han solicitado retiros y formación. Guatemala es un país con un vasto campo de posibilidades en el área de la educación en todos los aspectos. Aquí quiero compartir lo mejor de todo lo que está a mi alcance. Soy inmensamente agradecida a la Divina Ruah por haberme traído a este amado país.
HERMANA MARILETE JORGINA ROVER.
En mayo de 2021, toqué el suelo de San Luis Jilotepeque. Desde mi salida de Brasil venía con mucha expectativa con el objetivo de dar continuidad al trabajo pastoral y presencia en las Pequeñas comunidades misioneras donde las hermanas hacia años actuaban. Con la pandemia todo el servicio pastoral, principalmente la formación, se quedó estancada. Después de casi dos años de estar en esta realidad, puedo decir que fueron varios intentos, pero, por el gran número de personas contagiadas, el municipio estaba en alerta máxima. Era imposible reunir a los líderes.
Durante la Cuaresma de este año de 2022, hice una pequeña experiencia con tres grupos, en la línea de la espiritualidad: ministros de la Sagrada Comunión., lectores y delegados de la Palabra. Marqué presencia en la Casa de la Salud, una vez a la semana como voluntaria, acompañando y apoyando a la Hermana Perciliana. (Dorita) y a los “Misioneros de la Vida”. En este período de casi dos años, dediqué la mayor parte de mi tiempo a la fraternidad, y a la acogida de las personas que llegaban a la casa buscando a las hermanas. Este tiempo de casi dos años aquí, fue desafiador. Con la gracia de Dios estoy venciendo.
HERMANA MARIA FIAMONCINI
Hermana Marilete y yo llegamos a Guatemala el día 20 de noviembre de 1997. Vivimos en Mixco, hasta el 6 de mayo de 1999, cuando nos trasladamos para Guajitos y, el 20 de enero de 2020 fuimos a vivir en la nueva casa.
En 2011, fue a vivir en el municipio de Ixcán donde trabajamos la formación, Margarita y yo con las 40 comunidades multiétnicas. En 2013, hermana Lourdes Tereza Crestani se unió y juntas visitábamos a las comunidades todas las semanas, del martes al viernes. Preparábamos temas para las “Pequeñas Comunidades Misioneras Parroquiales” y apoyábamos a los líderes. Cada comunidad recibía nuestra visita una vez cada dos meses. El pueblo estaba muy agradecido, pues no había nadie que le diera algún tipo de formación.
El 11 de febrero de 2014, nos trasladamos para Pueblo Nuevo Viñas en el departamento de Santa Rosa. Allí trabajamos con medicina natural y cultivamos la mayor parte de las plantas medicinales utilizadas en el Proyecto de Salud. Colaboramos en la parroquia, con la formación de las comunidades, y en diversas actividades pastorales.
Trabajamos, con esmero lo del Medio Ambiente, incentivando para el cuidado de la Creación. Formamos conciencia del daño causado por el consumo de golosinas y bebidas gaseosas. Distribuimos plantas y semillas, Planificamos y realizamos actividades de limpieza en el centro de la ciudad y en la única carretera de acceso a otras ciudades, involucrando a la parroquia, la municipalidad, el centro de salud que ofreció material de limpieza, varias se presentaron con picop y otras que de muy buena voluntad se estuvieron presentes en la colecta de basura.
En noviembre de 2021 concluimos las actividades en Pueblo Nuevo Viñas y desde junio de 2022, vivo en la fraternidad de Guajitos, con las hermanas Alzira Munhoz, Gabriela Lourdes Noj Nij, las dos postulantes Luteria López Y María Aquino, colaborando en las diversas actividades de esta fraternidad.
Comentários
Que profusão de flores, sorrisos e alegrias missionárias, estampadas nesta página!
Agradecemos pela partilha de vida-missão vivenciadas ali em centro américa, onde aprendemos profundas lições de silêncio, contemplação, resistência e partilha entre os diversos povos indígenas em Guatemala!
Somos envitadas a seguir "donde esté floreciendo la nueva primavera y en un golpe de viento y canto, repartamos las flores!"
Abrazos con cariño!