“No dia em que Deus derrubou sua caixa de tintas... CICAF-JOVEM”

La tierra sagrada de Feira de Santana, Bahía, se preparó para recibir con gran alegría a las peregrinas que llegaban de Itaberaba-BA, Boa Vista-PR, Marabá-PA, Rondonópolis-MT, Argentina, Bolivia, Perú y Guatemala, para iniciar nuestro esperado encuentro de Novas Geraçoes-CICAF que aconteció del 25 al 28 de julio con la presencia animada de las hermanas Izaura Souza Cordeiro e Ivonete Gardini.

Llegar a la fraternidad de Feira de Santana fue muy especial, al entrar y ver en cada espacio de la casa un detalle preparado con amor, sentimos que nos esperaban con alegría.

Un encuentro con variedad de colores y culturas, pero con un mismo sueño: ser “hermanas del pueblo”, bebiendo de la misma fuente, compartiendo experiencias para seguir tejiendo con los diferentes colores el carisma de la Hermana Catequista Franciscana.

El encuentro estuvo marcado por la convivencia fraterna, la alegría, la amistad, el compartir, la disponibilidad de todas para hacer posible este encuentro.

La acogida con reverencia de la tierra sagrada de cada una, fue un espacio que nos ayudó a sentirnos hermanas y fortalecer nuestros lazos de familia religiosa.

Sentimos falta de las que por diferentes razones no estuvieron presentes, pero permanecimos en sintonía.

Nos alegramos del Sí que cada una continúa dando en la misión por el reino de Dios.

Compartir nuestra visión y opinión en el proceso de reorganización que estamos viviendo en la congregación fue muy importante y de mucha luz también para nosotras. Sentimos la apertura de las hermanas Izaura e Ivonete a quines le agradecemos su disponibilidad, acogida y cercanía con cada una y por animarnos a realizar este encuentro, exhortándonos a continuar.

Yo Gabriela de Guatemala, que participé por primera vez, me siento agradecida con el buen Dios por la oportunidad de conocer a mis hermanas. Escuchar las experiencias y la misión que cada una realiza es motivación en mi caminar.

Con alegría doy gracias al Creador que me dio hermanas.

Llegamos con maleta leve y retornamos con una mayor, llena de toda la riqueza que recibimos de este encuentro, con más ánimo y energía para continuar la misión en la Galilea de cada una.

Gracias a cada hermana que estuvo en sintonía con nosotras y a todas que hicieron posible este espacio valioso y lleno de la presencia de la Divina Rua.

Que Dios Padre y Madre las siga acompañando.